El mundo de las criptomonedas es peor que el salvaje oeste.
Es una jungla.
¿Y qué hay en la jungla? Pues animales hambrientos y emocionales que funcionan puramente por instinto.
Exactamente como el inversor medio durante un mercado alcista. Funcionamos por instinto y emociones humanas (emociones animales) en vez de funcionar por estrategias, lógica, paciencia y disciplina.
La única diferencia es que el instinto animal es dirigido a la caza y superviviencia mientras que el especulador lo quiere dirigir a un Ferrari.
Y es que ninja de la especulación, en un mercado alcista, absolutamente cualquier inversor tiene ganancias y se vuelve rico... en papel.
La mayoría empezará a ver mucho verde, mucho porcentaje y muchos ceros en su cartera, pero si no le das al botón de "vender" tus ganancias nunca fueron reales porque no las realizaste.
Porque llegará un momento en el que tocará bajarnos de la luna a la que pensabas que habías llegado.
¿En qué momento crees que estamos?
Un momento en el que tocará aceptar que la euforia ya ha pasado y deberíamos haber vendido, o haberlo hecho más tarde o más pronto, y que nuestras ganancias teóricas no han dejado de ser eso: una teoría.
Vender cuando no se tiene que vender es lo que nos hace, no sólo "devolver al mercado" las ganancias teóricas que teníamos en papel, sino incluso perder dinero de nuestra inversión inicial.
Y es que elegir el momento de vender, siempre es mucho más difícil que hacer una compra.
¿Sabéis por qué?
Porque cuando compramos criptos (o acciones o activos), lo hacemos de forma voluntaria (es algo premeditado). Pero vender es una decisión que nos vemos forzados a hacer en algún momento.
Puede estar toda tu vida sin comprar ningún activo, pero una vez has comprado algo habrá un momento que tendrás que venderlo o intercambiarlo.
El quid de la cuestión, es que cuando toca vender nos veremos forzados a hacerlo sólo bajo el paraguas de dos situaciones: por debilidad o por fortaleza, es decir que...
Si no vendemos en fortaleza, terminaremos vendiendo en debilidad.
Cuando vender criptomonedas
Otra manera de decirlo es que o bien vendemos por haber ganado mucho en papel y querer hacer que estas ganancias se vuelvan de verdad, o vendemos porque pensamos que se irá aún más hacia abajo.
Eso hará que queramos asegurar las ganancias que tenemos, o que vendamos por no querer tener más pérdidas, por debemos acordarnos de estos queridos macroespeculadores:
Si no vendes demasiado pronto, terminarás vendiendo demasiado tarde.
Vender en fortaleza
Vender en fortaleza es cuando todo el mercado está fuerte.
Ves a tus altcoins (y las de todo el mundo) subir como la espuma y hay un miedo que se apodera de ti: el fomo (fear of missing out, el miedo de perderte algo).
En este caso el miedo de perderte una subida aún más grande...
Porque aunque durante el ciclo alcista o incluso en las lateralizaciones y parones de la subida un +100% de ganancias te parecía espectacular, ahora de pronto ya te parece poco y empiezas a imaginarte que la opción de hacer un +1000% está muy cerca.
Que no es una locura.
Vender en debilidad
En cambio cuando toca vender en debilidad es porque el precio ya ha bajado hasta unos niveles que no te queda otra que aceptar que te has equivocado.
Equivocado muchas veces no en la elección del activo, sino equivocado en cuando vender.
Es cuando te preguntas si vas a vender ahora con estas pérdidas, o te esperarás a otro ciclo alcista que a saber los años que se puede tomar.
Si os pregunto en qué momento es mejor vender (en debilidad o fortaleza), todo el mundo dirá que en fortaleza, claro, pero...
Lo dirán a toro pasado, porque ambos (fortaleza o debilidad) son momentos igual de difíciles para tomar una decisión.
Porque muchos especuladores basan sus decisiones en las emociones del momento, y no en estrategias.
De hecho un gran porcentaje tienen estrategias teóricamente lógicas de salida, pero que tiran por la borda e intercambia por ventas emocionales en momentos específicos.
Pero en lo que todo el mundo estará de acuerdo es que nunca queremos estar en una situación donde vendemos en debilidad.
Que si nos vemos en una situación de hacerlo lo tendremos que hacer, pero siempre queremos vender en una posición de fortaleza y pagarnos a nosotros mismos.
De nuevo: si no vendes pronto, terminarás vendiendo tarde.
Mi pregunta para vosotros es, ¿venderéis en debilidad, o venderéis en fortaleza?